Cómo es isla Santa Cruz, la puerta de entrada predilecta de Galápagos

Es la isla más escogida de los turistas. De los 270.000 viajeros que cada año pasan por Galápagos, 200.000 entran por el aeropuerto de la isla Baltra para llegar a Santa Cruz.
 
La isla de Santa Cruz está en medio del archipiélago de Galápagos. Y eso le da una ventaja, pues los tours, en su mayoría, salen de esa isla hacia otras. 

Para llegar a la zona poblada de San Cruz se debe hacer un periplo, pues no tiene aeropuerto. Los vuelos comerciales que salen de Quito y Guayaquil llegan a la isla de Baltra, que está al norte de Santa Cruz. Baltra, usada el siglo pasado como una base militar estadounidense, está separada de Santa Cruz por un canal, el Itabaca.



Cuando los vuelos llegan a Baltra hay que tomar buses que cobran cinco dólares para llegar al canal de Itabaca (años atrás eran gratis). Hay que pasar el canal en ferrys acuáticos que cobran 1 dólar. De allí hay que tomar un bus que puede tomar 45 minutos o un taxi, que cobra 25 a 30 dólares hasta Puerto Ayora, el municipio de Santa Cruz. La parte poblada está al sureste. 

Puerto Ayora es el municipio más grande de Galápagos. Casi su población triplica a San Cristóbal, la capital de Galápagos que está al este del archipiélago.

La popularidad de Santa Cruz hace que el destino incluso sea un poco más caro que San Cristóbal (los pasajes son más altos).

Al igual que San Cristóbal, la actividad turística de San Cruz se concentra en unas tres avenidas. La principal es la Charles Darwin, que va a lo largo del malecón, desde un supermercado que está cerca a la zona del muelle de pasajeros hasta el otro extremo, la estación científica que lleva el mismo nombre. Es el hogar del Solitario George, la tortuga más famosa. 

Charles Darwin es el corazón comercial y turístico de Santa Cruz. A toda hora se ve caminando a extranjeros en la avenida. Unos que han llegado por cuenta propia y otros acompañados de los guías de los cruceros que desembarcan en tours en esa isla,



Dentro de la larga avenida hay restaurantes, cafeterías, agencias que ofrecen tour, hostales, hoteles, tiendas de venta de ropa y souvenirs. Por las noches, la vida nocturna es dinámica en esa avenida. Los turistas que durante el día se han ido a recorrer llegan a esa zona a cenar, a tomar una bebida y departir entre amigos.

Durante los últimos años se han abierto establecimientos que tienen ambientes que apuntan a atraer a los estadounidenses y que buscan comida texmex, grill o de especialidades de marsicos.  Hay lugares de todo precio, para bolsillo un poco ajustados como holgados. Son emprendimiento nacionales. En esa isla no se va a encontrar un KFC, un Burger King o McDonald's.

El Santa Cruz hay un amplio porcentaje de la población que es de la Serranía ecuatoriana, por eso hay un acento marcado en buena parte de los negocios. De hecho, en la isla hay una colonia de Salasacas, una comunidad indígena.  Ellos manejan parte de las tiendas de ventas de souvenirs. 


Incluso las tiendas que están en el aeropuerto. Así, si alguien quiere irse con un recuerdo, es mejor comprarlo en la parte poblada. 

Los lugareños, al igual que los ecuatorianos de la parte continental, se muestran abiertos a los turistas. Viven de lo que genera el turismo. No obstante, como en todo sitio turístico, hay mejoras por hacer en atención al cliente. Es probable que por el camino tenga una experiencia no tan agradable, especialmente al contratar un tour. 


A veces, de tanto atender cotizaciones, los dependientes de esas agencias suelen ser cortantes o secos en las respuestas. 

A diferencia de San Cristóbal, dentro de la zona urbana no hay una colonia de lobos marinos, pero se pueden ver uno que otro en la zona del mercado o descansando cerca al muelle. Al caer la tarde hay lobos que suelen ser juguetones y dar sus espectáculos a los turistas. 

Puerto Ayora tiene un malecón similar a Puerto Baquerizo Moreno. Pero un poco más movido en las noches. 

La economía de este municipio se maneja en dólares. Los comercios han ido aceptando el cobro con tarjeta de crédito, pero la mayoría aún prefiere el pago en efectivo. 








 


Comentarios